18 dic 2013

Bitcoin y Libertad

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Quienes se acercan a Bitcoin descubren pronto que está muy ligado a la libertad. No hay un ente regulador que dirija el flujo y valor de esta criptodivisa, ningún ente público o privado posee control sobre Bitcoin. Emplear este medio de pago es una decisión de cada individuo y su probable éxito o posible fracaso está condicionado a la aceptación que tenga por parte del mercado, es decir, de cada uno de nosotros.
Si fracasa, no habrá gobierno o estado al que acudir gimoteando. Es decisión de cada quien invertir en esta tecnología y por ello es importante informarse debidamente de sus riesgos y bondades. Muchos gobiernos, así como la Autoridad Bancaria Europea han alertado, con temprano celo, sobre los posible riesgos de adquirir la unidad monetaria de Bitcoin. Lástima que no hubiesen hecho lo mismo con el caso de las preferentes. Espero que se queden ahí, en avisar de los riesgos y que dejen a los ciudadanos elegir, libremente, si desean asumirlos o no.

Quién nos protege de Bitcoin?

Se está haciendo normal leer y escuchar noticias sobre esta nueva modalidad de pagos denominada Bitcoin. Lo curioso es que la preocupación principal de la gente es: "¿quién me protege si esto acaba mal?".
La ventaja de que Bitcoin no esté regulado por ningún gobierno es la mejor protección que puede tener la gente. No puede confiarse!. Será mejor que se informe, que averigüe si es fiable o no, investigue en profundidad en que consiste, en los riesgos de operar con esta criptomoneda ya que, en última instancia, cada uno de nosotros somos responsables de la decisión que tomemos con Bitcoin. Si Bitcoin resulta ser un acierto, aquellos que se arriesgaron invirtiendo en este sistema de pagos verán compensado su riesgo (o apuesta) y quienes tomaron una posición más precavida se beneficiaran de una nueva tecnología con todas las bondades asociadas a ella. Los primeros tendrán una justa recompensa a haber decidido arriesgar su capital en algo novedoso y los segundos se verán beneficiados con una nueva alternativa a los sistemas de intercambio comercial con dinero fiat y medios de pago tradicional. ojalá y dejemos que sea la gente, es decir, el mercado quien decida el futuro de Bitcoin y que no nos empeñemos en delegar en los políticos de turno el devenir de una criptomoneda que, entre otras cosas, nos permitiría poner el poder adquisitivo de nuestros ahorros a salvo de esos depredadores que forman parte del estado. De los mejores artículos que he leído analizando el Bitcoin es este de D. Lacalle (Bitcoin: democracia monetaria o cuento chino) invertir o no en Bitcoin debe ser una decisión de cada quien y en consecuencia asumir el riesgo y sus consecuencias. os dejo un vídeo ilustrativo de lo dicho.